A un congresista de Indiana le preocupa que los niños refugiados de Centro América puedan suponer un riesgo para la salud pública debido a la “circulación del ébola”.
Y el ámbito del Twitter está lleno de gente que pregunta: “¿cómo podemos traer estos pacientes a Estados Unidos?”, se quejan de que “¡no hay suficientes problemas en Estados Unidos! ¡Importemos pacientes con Ébola!”, y especulan que tratarlos aquí es “sumamente irresponsable”.
Pero la posibilidad real de contraer ébola es increíblemente remota.