Balou, el único oso de los Pirineos que no desciende de Pyros. / O.N.C.F.S.-FERUS |
Hallado muerto Balou, clave para la diversidad genética del oso en los Pirineos
La Generalitat busca una solución a la consanguinidad que causa el dominante Pyros
La muerte supuestamente accidental del
oso Balou, el último macho que se soltó en los Pirineos en 2006, puede
significar un grave retroceso en el programa europeo Life para la recuperación de la especie en la cordillera, de donde desapareció por culpa de la caza autorizada y el furtivismo.
Balou, de 11 años de edad y
patrocinado por los actores Fanny Ardant y Gérard Depardieu, fue
encontrado muerto el martes en la zona de Melles (Haute-Garonne),
localidad del sur de Francia próxima a la frontera de la Vall d’Aran. Un
miembro del colectivo ecologista francés Ours encontró restos del
cadáver del animal y alertó inmediatamente a los técnicos del grupo de
seguimiento del oso de la Oficina Nacional de Caza y Fauna Salvaje. La
identificación fue fácil, ya que Balou llevaba una marca roja en la
oreja derecha y el collar que permitía localizarlo se encontró a pocos
metros de su cuerpo. Tenía heridas en la espalda y en las patas.
Las primeras evidencias parecen
indicar que el animal sufrió una caída entre el 4 y el 6 de junio en una
zona rocosa y muy empinada. Ivan Afonso, técnico de Medio Ambiente del
Conselh Generau d’Aran, señala que el despeñamiento suele ser una de las
causas más frecuentes de la muerte de los osos, además del
envenenamiento y el furtivismo. En este caso, los buitres y alimañas aún
no habían atacado el cadáver, que ha sido trasladado a la ciudad
francesa de Toulousse para practicarle la autopsia y conocer las causas
exactas de su muerte.
“No es una buena noticia”, manifestó
Alain Reynes, director de Pays-de-l’Ours-Adet, una organización que
defiende la reintroducción del oso en el Pirineo. Balou estaba llamado a
desempeñar un papel importante en la reproducción y su desaparición va a
debilitar aún más a la población.
De hecho, Balou era el único
plantígrado no emparentado con Pyros, el macho dominante y padre o
abuelo del resto de osos nacidos en el Pirineo central desde 1996. Los
técnicos afirman que Pyros, de 26 años, no quería rivales a la hora de
cortejar y obligaba a los otros machos a mantenerse alejados de las
hembras en celo.
A pesar de ello, Balou fue el oso más
detectado por los equipos de seguimiento. Fue visto en 99 ocasiones y
las últimas imágenes de vídeo registradas datan del 24 de mayo en Melles
intentando acercarse a un grupo de hembras. En setiembre de 2008 fue
herido en la pata delantera derecha durante una batida con un cazador
que lo confundió con un jabalí.
“Una cosa no es justa por el hecho de ser ley.