La niña paquistaní que sufrió un atentado de los talibanes pide
apoyo para garantizar el acceso a la educación en el mundo al recoger el
premio Sájarov
"Algunos niños no quieren consolas, quieren un libro y un bolígrafo
para ir al colegio", dijo hoy al recoger su premio Sájarov con tan solo
16 años Malala Yousafzai, la joven que fue tiroteada por los talibanes
por luchar por los derechos de las niñas a la educación.Ataviada con un sari color salmón, la niña se mostró segura en su discurso e incluso empezó su alocución bromeando sobre su estatura y la del estrado desde el que le tocó dirigirse al hemiciclo. "Me he puesto tacones, espero que puedan verme bien", dijo ante cientos de eurodiputados y varias decenas de personalidades. En un discurso de alrededor de cinco minutos que inició con un saludo religioso, Malala lamentó que en su país las niñas "sufran a menudo acoso sexual y no las dejen ir más allá del perímetro de su casa". "Hay que cambiar de mentalidad. Un país no es más fuerte por el número de soldados que tiene, sino por su índice de alfabetismo", señaló.
"Un país con gente con talento y educada es el verdadero superpoder. No es el país con decenas de miles de armas. Cambiemos nuestro concepto", ha reclamado Malala en su discurso ante el pleno del Parlamento Europeo al recoger el Premio Sájarov, que le ha otorgado este año la Eurocámara por unanimidad de todos los grupos en reconocimiento a su lucha a favor de la educación universal de las niñas en Pakistán y en el mundo.
Ante la atenta mirada de su padre, el maestro Ziauddin Yousafzai, quien la animó con 12 años a escribir un blog con seudónimo para la BBC denunciando los problemas de las niñas en Pakistán, Malala aprovechó para reclamar la atención de la Unión Europea para los millones de menores en el mundo que no tienen acceso a la educación.
Malala dedicó su premio a la libertad de conciencia, "a los héroes sin nombre de Pakistán y a todos los que luchan por los derechos y las libertades".
La joven, que después de recibir tratamiento médico en Londres sigue allí su educación, quiso recordar una cita del filósofo Voltaire en su alocución. "No estoy de acuerdo con lo que decís, pero defenderé hasta la muerte vuestro derecho de decirlo", recordó.